¿Qué diferencias hay entre lengua y dialecto?

¿Qué pensarías si te dijeramos que el español, el italiano y el francés son dialectos? Seguramente dirías que es un error porque realmente son lenguas. La cuesión es que las fronteras entre lengua y dialecto no siempre son claras. Las diferencias entre lengua y dialecto es una cuestión que desde siempre ha generado numerosas dudas entre filólogos y lingüisticas. ¿Cuándo un dialecto pasa a convertirse en lengua?, ¿cuántos dialectos puede tener una lengua? o ¿en qué momento un dialecto pasa a convertirse en una lengua?

Según el Diccionario de la lengua española, un dialecto es una «variedad de un idioma que no alcanza la categoría social de lengua» o un «sistema lingüístico considerado con relación al grupo de los varios derivados de un tronco común». Si nos centramos en la segunda acepción, entonces podríamos decir que el francés, el catalán, el italiano, el portugués o el español son dialectos del latín. Pero también encontramos otros dialectos del latín que no alcanzaron la categoría de lengua, como es el caso del leonés y del aragonés.

Durante la Edad Media el castellano se erigió como la lengua culta, quedando el aragonés y el leonés reducidos al ámbito rural, siendo hoy considerados como «hablas», es decir, un ‘sistema lingüístico de una comarca, localidad o colectividad, con rasgos propios dentro de otro sistema más extenso’. La cuestión es que no todos los dialectos se desarrollan y evolucionan de la misma forma. Algunos como el castellano, con el paso del tiempo, se convierten en lenguas, mientras que otros como el leonés o el aragonés permanecen como tal, aunque ambos vengan del mismo tronco común que es el latín.

La confusión que podría generar la consideración del español como dialecto tiene que ver con el hecho de que para la mayor parte de los hablantes, el concepto de dialecto se refiere a una modalidad geográfica deficiente o defectuosa de una “lengua oficial.

El castellano es una lengua porque cuenta con un gran número de hablantes que se comunican a través de ella y porque se diferencia de forma clara y notable con otras lenguas como el francés o el italiano. Pero además, cuenta con una normalización lingüistica basada en los preceptos de organismos creados para velar por el desarrollo lingüistico de esta variedad.

Pero lo cierto es que la lengua está conformada por diferentes variedades que son manifestaciones de esa propia lengua influida por una serie de factores extralingüisticas como la geografía, el entorno social o el contexto.

Además, es importante tener en cuenta que la estandarización es un concepto muy importante para determinar si un sistema lingüistico es una lengua o un dialecto. Se conoce como lengua estándar a aquella variedad de una lengua que sirve como modelo o patrón superpuesto a otras variedades geográficas, sociales o contextuales de una misma lengua.

Un concepto abstracto que permite que una comunidad de habla se guíe por una serie de criterios lingüisticos y gramaticales comunes. Considerado al mismo tiempo como la lengua de prestigio frente a otros dialectos y variedades lingüisticas minoritarias. Es la estandarización lo que permite que un sistema sea considerado como lengua o dialecto.

Pero también debemos tener en cuenta la mutua inteligibilidad, que consiste en que si un hablante no entiende lo que dice su interlocutor, entonces hablan lenguas diferentes. Aunque este criterio no es tan preciso, ya que un hablante de español peude entender mejor o peor a un hablante de gallego, catalán o portugués.

Por norma general, se considera como lengua aquel sistema de habla que dispone de una gramática, de una ortografía y de diccionario. Sin embargo, la presencia de ests factores no es suficiente para que un dialecto sea considerado como lengua. Además, hay que tener en cuenta que una lengua siempre se presenta siempre de forma variada en función de aspectos sociales y geográficos. Toda lengua se actualiza en una modalidad vinculada a una geografía, de manera que no hay modo de hablarla si no es hablando una de sus modalidades o dialectos. Así pues, podemos encontrar el español de Andalucía, el español rioplatense, etc. Pero en todos los casos hablamos de una misma lengua, que es el español, aunque haya distintas modalidades.

En conclusión, la diferencia entre lengua y dialecto depende tanto de factores lingüisticos como de aquellos que no están relacionados con lo gramatical pero sí con los hablantes. Algunos de los factores que determinan si un sistema liungüistico es una lengua o un dialecto son la literatura, la estandarización, la enseñanza o el uso público de dicho sistema.  A lo que hay que añadir la complicación para delimitar qué es una lengua y qué es un dialecto, puesto que la separación entre ambos conceptos no es nítida. Todo depende de los factores que tomemos en consideración. En cualquier caso, hay que señalar que ambos conceptos no son excluyentes, sino complementarios.

 

 

 

Share

Comentarios y pings están actualmente cerrados.

Comentarios cerrados.